Foto: Kami Velvet
"En algunos eventos he propuesto cantar en vez de desfilar con bikini, pero me decían no, desfila nomás".
Actriz, cantante, modelo. 24 años. Ha representado al Perú en el festival de Viña del Mar 2011, tiene una empresa de bikinis y su novio es quiropráctico. Quiere que la valoren como cantante, pero la hace difícil. Conversamos con ella semanas antes de que publicara un video musical donde salía semi desnuda y besando a la actriz Vanessa Terkes. Debe haber una explicación.
En Facebook, hay más de 30 perfiles falsos que llevan tu nombre. Un fanpage, también falso, tiene más de 174 mil seguidores. La mayoría de estos espacios están muy bien actualizados, con fotos y noticias. ¿Qué sientes?
Al comienzo se siente como un halago. “La gente sabe quién soy”, “me conocen”. Después ya no es tan agradable. Por ejemplo, me contacté con el dueño del fanpage de 174 mil seguidores. Le pedí que me ceda la página y no quiso. Dijo que la creó antes de que yo haga la mía, que era su trabajo y que, si yo quería, me ponía como administradora. ¿Qué hago? ¿Peleo contra la página falsa de 174 mil fans? ¡Mi página oficial tiene 21 mil! Me dicen que debería hacer que cierren esa página, pero me da flojera. No me gusta pelear. ¿Tú qué harías?
Lo correcto sería que cierre la página.
No lo quiere hacer. Además, como hay tantos seguidores, no se le puede denunciar en Facebook. Piensan que soy yo.
Además de los fans virtuales, tienes un club de fans clásico, como los de antes.
Hasta ahora no me la creo. Es raro. Mira, soy de las personas que se encierran dos o tres días en su cuarto, viendo tele y comiendo, en pijama y sin bañarse. Cuando vuelvo a conectarme, veo que me ponen en Twitter: “ay, ¿por qué no nos contestas?”, “eres una creída”. Es extraño que la gente esté pendiente de mí, pero también es bonito.
¿Te reúnes con ellos, verdad?
Sí. Por Navidad hicimos intercambio de regalos. Cuando trabajaba en la radio, me esperaban a la salida y me llevaban cosas. Siempre van a mis conciertos. Hasta han hecho sus polos de “shawrockers”. Es lindo. Eso me dice que algo bueno estoy haciendo, ¿no? Ellos me apoyan y me ayudan mucho a lidiar con los mensajes negativos que cierta gente suele mandar de vez en cuando.
¿Te siguen poniendo nerviosa las entrevistas?
Sí, todavía, sobre todo las de televisión en vivo. ¡Me salen ronchas! No me pasa cuando canto ni cuando modelo. Me pongo ansiosa, pienso en no meter la pata, no sé. No me acostumbro.
En una entrevista dijiste que te molestaba que te comparen con un pedazo de carne.
Suena fuerte, ¿no? Me refería a que no me daban tantas oportunidades en la música como las que tenía como modelo. Tengo muchísimo trabajo modelando y eso me permite solventar gastos para hacer música. En algunos eventos he propuesto cantar en vez de desfilar con bikini, pero me decían “no, desfila nomás”.
¿Te desmotivaba?
Claro. Al igual que yo, hay artistas que luchan contra esta situación. He querido ser cantante desde chiquita, pero hay más desfiles de modas, sesiones de fotos y comerciales que eventos de música. ¡Tengo que trabajar! Lo que no me gusta es que me encasillen en una sola faceta.
Tu momento más feliz ha sido cantar en Viña del Mar.
Ese sentimiento no lo puedo comparar con nada, lo juro. Por punto y medio quedé en segundo puesto. Quiero regresar.
Tu momento más feliz ha sido cantar en Viña del Mar.
Ese sentimiento no lo puedo comparar con nada, lo juro. Por punto y medio quedé en segundo puesto. Quiero regresar.
Has actuado en Cementerio General, una película de terror. ¿Crees en lo paranormal?
Sí. Cuando estaba en el colegio, jugaba ouija en mi cuarto. ¡Me respondían! En esa época creía mucho en eso. Una vez se abrió solito un cajón. En otra oportunidad, se movió el ventilador que tenía al lado de mi cama. Eso nomás. Nunca he visto nada.
Algo curioso: cuando presentaste la película en el cementerio El Ángel, varios periodistas te preguntaron si posarías desnuda. ¿Qué relación había entre los muertos y estar sin ropa?
¡No lo sé! Por eso aclaré en la conferencia de prensa que, por si acaso, no iba a salir desnuda en la película. Me fastidió un poco porque en ningún momento dije que iba a hacerlo. ¡De la nada salió todo eso! Pero ya estoy acostumbrada.
¿Te han dado ganas de patear a un periodista de espectáculos?
A veces me sofocan un poco, pero tengo paciencia.
¿Cómo haces?
Respiro y comprendo que están haciendo su trabajo.
¿Te han dado ganas de patear a un periodista de espectáculos?
A veces me sofocan un poco, pero tengo paciencia.
¿Cómo haces?
Respiro y comprendo que están haciendo su trabajo.
Como preguntarte si saldrás desnuda.
Respeto todos los trabajos. Entiendo que hay distintos tipos de prensa y que cada tiene uno su función. No puedo pelearme con todos, ¿no? He visto entrevistas en la televisión en las que los artistas se exaltan. No se ve bien, pues.
Te leo un titular de un diario: “Huesero le endereza la columna”. Se refiere a tu novio, que es quiropráctico. ¿Te ofenden estas cosas?
Para nada, no me ofende. ¡Me da mucha risa!
Hay un video en Youtube donde sales parada en cierto lugar y un auto de carrera da vueltas alrededor tuyo. ¿Pensaste que ibas a morir?
¡No!
Se veía peligroso.
Fue divertido. Me encanta la adrenalina, soy bien arriesgada. Aunque después dimos una vuelta en el auto y se cayó el tubo de escape. ¡Qué suerte que no ocurrió antes!
¿Hay algo de lo que te arrepientas?
No, no creo.
¿Algún programa?
No.
¿Very Verano?
No.
Hay un video en Youtube donde sales parada en cierto lugar y un auto de carrera da vueltas alrededor tuyo. ¿Pensaste que ibas a morir?
¡No!
Se veía peligroso.
Fue divertido. Me encanta la adrenalina, soy bien arriesgada. Aunque después dimos una vuelta en el auto y se cayó el tubo de escape. ¡Qué suerte que no ocurrió antes!
¿Hay algo de lo que te arrepientas?
No, no creo.
¿Algún programa?
No.
¿Very Verano?
No.
¿Martín Hidalgo?
No. He tenido muchos errores, como todos, pero he aprendido la lección. No soy la misma Leslie de hace dos o tres años.
¿En qué has cambiado?
Soy más desconfiada. Antes daba todo sin recibir nada a cambio. Hoy soy recelosa con mis cosas. Analizo, tomo decisiones con mayor calma. Antes quería aceptar todo, lo cual me hizo daño. Entré en shock cuando estuve en El Gran Show porque también estaba en el teatro, me había mudado y vivía sola, no comía. Me comprometí con muchas tareas y sentía impotencia porque sabía que podía hacerlas muy bien, pero por el cansancio, el estrés y la falta de tiempo terminaba agobiada. Ahora estoy muy tranquila. Tengo tiempo para mí, para mi trabajo, para mi familia.
¿Qué pregunta te gustaría que ya no te hagan jamás?
Ay, si voy a salir desnuda en algún lado. Si lo hago, les avisaré en su momento. Además, ¡todos los días me veo calata cuando estoy en la ducha! Molesta un poco que solo se fijen en eso. No ganaré un Oscar con mis actuaciones, pero quisiera que también vean otras facetas de mí.